Treinta minutos
Cae el sol El viento arrastra pausado el tiempo
El mar se embrutece fiero
contra los callaos
Estos treinta instantes me abandonan como el sinsabor de la despedida Y mis oídos sólo escuchan la fiereza del azul sentido Estos segundos que sorprenden, que barruntan colores de huida Esta media hora infinita, estos treinta minutos de herida Esta mitad de una Este fin Este principio
SALVEMOS NUESTRO NORTE: ¡¡NO AL MACRO MUELLE!!
Agaete. Puerto de las Nieves
(c) Josefa Molina
@JosefaMolinaR
josefa molina autora 
¡Di que sí! Respetemos este azul que, por circular, es infinito. Bonito poema!!
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El respeto sí, a esos espacios que, por ser de todos, no es de ninguno, y así debe de ser. ¡Muchas gracias, nena!
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Muy lindo. Muy sentido. Gracias por compartir.
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Mil gracias, Celia, por pasarte por aquí y comentar. Un beso!
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Genial poema… Abrazos
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Gracias mil, Eduardo, gracias por leerme y por ESTAR!
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