Zombis
Se abren las puertas. Afuera, los cuerpos se mueven impulsados por el aliento cascado de la valla metálica. Suenan portazos. Las puertas de los coches caen empujadas por la inercia de su propio peso. Decenas de pies se arrastran siguiendo el sendero de señales en el suelo. El silencio de la mañana se rompe por el tintineo lento de las ruedas que hacen cosquillas al suelo de cemento. Una línea de zombis rebuscan papeles en los bolsillos de sus chaquetas.
Son las 9.15 de la mañana.
Es sábado.
Toca hacer la compra.
…hay personajes en la actualidad así…
Genial!!! Me ha encantado!!!
Gracias!!!
Me gustaLe gusta a 2 personas
Mil gracias, Andrés, por comentar. No pierdas las mañas!
Me gustaMe gusta
Vaya mañana les espera a quienes reponen y reciben las tarjetas plásticas del irreverente consumismo. Nos queda la literatura y los diálogos con toquitos de cariño y buenos deseos.
Gracias por tus textos, frescos, hoy ‘ultracongelado» Abrazos
Me gustaLe gusta a 2 personas
Muy bueno a seguir asi pepisssss
Me gustaMe gusta
Muchas gracias, Tino. Sí, afortunadamente, nos queda la literatura. Abrazos!
Me gustaMe gusta